Capitulo 23♥

Pedro: Al restaurante que esta acá nomas... Digo para no irnos tan lejos.
Paula: Vamos... No hay problema! (Sonríe)
Subieron al auto, a la cual Pedro iba a manejar.
Música... Era lo único que se escuchaba en ese auto, silencio de los dos... Ni una palabra.
En algún momento alguien tenía que hablar y fue ella, Paula...
Paula: Que lindo tema.
Pedro: Te gusta Vicentico?
Paula: Me encanta! (Ríe) ¿A vos?
Pedro: También jajaj...
Después de esas risas, volvió el silencio... Minutos, segundos pasaban.
¡Al fin llegaron al destino, mejor dicho al restaurante!
Pedro: Llegamos señorita!




Ya los dos sentados, charlando de cualquier tema... Comenzaron todo, desde el príncipe, hermanos, padres, tíos, abuelos, sobrinos, todo... Y Pedro le tuvo que contar su dura historia de su madre quien había muerto, por cáncer.
Pero jamas tocaron el tema de "Nosotros" o "Lo sucedido".
Pedro: Después te quiero llevar a un lugar que conocí una vez que vine con mi mamá...
Paula: Te parece? 
Pedro: No queres ir?
Paula: Si quiero, pero es un lugar a donde ibas con tu mamá...
Pedro: Después te cuento... (Sonrió)
Paula: Esta bien.
Fue así que siguieron charlando, mejor dicho... Conociéndose, cada vez mas.
Paso 1 hora y media; Pedro y Paula tuvieron una pequeña discusión al pagar lo de la comida, pero como todo caballero, Pedro termino pagando.
Los dos levantaron sus cosas de la mesa y salieron riéndose y muy charlatanes de allí... Subieron al auto y lo primero que dijo Paula es..
Paula: ¿A donde es?
Pedro: Vos déjate llevar, no te voy a secuestrar e?
Paula: Ya se tonto... Se que sos incapaz de hacer algo así.
Pedro: Aunque estaría bueno secuestrarte por un tiempo, no? Jajaja
Paula: Tonto.. Jajaj
Esté rió y le dio un beso en la comisura de los labios de Paula.
Después de ese dulce beso en la comisura de los labios de está, esté arranco el auto y partieron al paraíso, como Pedro lo llamaba, aunque Paula aún no sabía ni como se llamaba.


Destino: "Paraíso" ... Paz , amor, tranquilidad, aire fresco.
Paula: Que hermoso lugar... (Mirando por la ventanilla del auto, aún sin bajar)
Pedro: Bajamos o solo miramos de acá?
Paula: Bajemos... Jaja
Pedro sonrió y bajo primero, después dio la vuelta y la ayudo a Paula bajar...
Paula: ¡Paz!
Pedro: Demasiada paz... Mucha tranquilidad.
Paula: Es hermoso...
Pedro: Esta refrescando acá... ¿Queres mi campera?
Paula: Pensé que no íbamos a salir, por eso no traje...
Pedro: Yo si...
Paula sonrió.
Esté abrió la puerta trasera del auto y saco su campera; Ya con la campera en la mano se la coloco a Paula.
Paula: Gracias.
Los dos se sentaron en unas piedras que había cerca de ese lugar tan lindo, que a Paula le había encantado.
Pedro: Mi vieja me dijo la ultima vez que vino para acá; "Se vas a venir acá, espero que sea con la mujer que realmente quieras mucho y la respetes... Como a mi". (Bajo su mirada)
Paula: De seguro es hermosa tu mamá, no?
Pedro: Por dentro y fuera... Siempre lo fue!
Paula: Lo es, Pepe.
Pedro: Pero no es lo mismo, ya. No la tengo conmigo como antes la sabía tener, necesito tantos sus consejos...
Paula: Pepe... ¡De seguro te dio mil consejos, y de todos esos consejos te van guiar por el camino correcto! Y no te olvides que tu mamá esta alado tuyo siempre y que por mas que no la veas ella te esta alentando, en todo.
Pedro: Gracias. ¡Me ayudan mucho tus palabras!. Por esa razón te traje acá, sos la persona que quiero y respeto en este momento, y quiero seguirlo haciendo hasta estar juntos.
Paula lo abrazo fugazmente.
Pedro: Te quiero mucho!
Paula: Yo también te quiero, Pepe!
Esté se separo y le dio un beso tierno y dulce a la vez.
Fue así que charlaron de muchas cosas, se tiraban indirectas, chistes, risas, sonrisas... Todo eso en un momento se iba a terminar, claro tenían que volver al hotel.
Eran las 2.30 am... Ellos estaban volviendo al hotel, ¡Felices!.